Disciplina y excelencia, dos palabras que identifican a la Brigadier Mayor de la EMAVI

Ser Brigadier Mayor de la Escuela Militar de Aviación “Marco Fidel Suárez”, EMAVI, no sólo es obtener el máximo grado y distinción entre los Cadetes y Alfereces, significa ser el ejemplo y referente de dedicación, compromiso y gallardía, de quienes se forman para ser los futuros Oficiales de su Fuerza Aérea Colombiana.

La Brigadier Mayor María José Gómez de tan solo 20 años, hace parte de las pocas mujeres que han ostentado el grado más alto dentro del alma máter de la Oficialidad. Sus capacidades, cualidades y méritos la han hecho acreedora de ocupar este privilegiado lugar, un reto que ha asumido con la seguridad y responsabilidad que siempre la han caracterizado.  

Esta joven paisa, menor de tres hermanos, desde pequeña siempre ha sido muy activa, a los 9 años ya pertenecía a los scouts, allí conoció la importancia de servir a los demás con pasión y amor. Su madre, docente de artística, siempre trató de tenerla ocupada haciendo que cada día fuera productivo en la vida de su hija. Entre semana estudiaba consagrada en un colegio de Medellín, los sábados en la mañana asistía a clase de baile, recibía clases de inglés y en las tardes asistía a su grupo de scouts. 

Inicialmente quería estudiar medicina como su padre, pero después conoció a la Fuerza Aérea Colombiana, indagando sobre lo que hacia esta Institución y sintiendo gran admiración por los aviones.

Cuando terminó su bachillerato, María José estaba segura de lo que quería hacer y con esa misma seguridad que la ha caracterizado siempre, les dijo a sus padres que quería ingresar a la Fuerza Aérea Colombiana y hacer parte del Programa de Ciencias Militares Aeronáuticas, uno de los cuatro Programas Académicos de la EMAVI.

Las familias en Antioquia son tradicionalmente muy unidas, la mamá de María José no concebía la idea de que su hija más pequeña se fuera lejos de la casa, lejos del seno de su hogar, pudendo estudiar otra carrera en Medellín; pero consiente de su sueño, su madre le dijo un día que las personas tenían que estar donde fueran felices, y sabía que si María José lograba entrar a la Fuerza Aérea iba a ser la niña mas feliz del mundo, no tuvieron más opción que apoyarla.

María José quería volar, pero no cumplió con uno de los requisitos que le permitiría formar parte del cuerpo de vuelo. Sin embargo, no se dio por vencida y continuó adelante con su proceso de incorporación, obteniendo excelentes resultados en la prueba de conocimientos, al igual que en las pruebas psicológicas y médicas.

Un día, exactamente el 29 de noviembre de 2019, María José se preparaba para asistir a su ceremonia de graduación con el fin de obtener su titulo de bachillerato, cuando de repente recibe una llamada de una señora Coronel que le pregunta si se encuentra con su familia, a lo que ella responde que sí, la Oficial le pide que por favor ponga su celular en alta voz y es el momento cuando le dicen: ¡Bienvenida a la Fuerza Aérea Colombiana!

La felicidad se apoderó de esta joven, y sus padres la compartieron con ella, ese día significó todo para su vida, fue el mejor regalo de graduación, el más esperado y anhelado de todos.

A partir de ese momento todo cambió. Cuando ésta joven ingresó a la Escuela Militar de Aviación “Marco Fidel Suárez” como aspirante del Curso Regular de Oficiales No 95, el día 14 de enero de 2019, sabía que lo más difícil iba a ser todo el proceso de adaptación, pero estaba segura de que lo lograría y nada la haría pensar lo contrario.

Desde un principio se propuso ser una excelente Cadete, destacarse por sus habilidades y capacidades, tenía claro cómo debía ser su comportamiento como mujer, como persona y como militar, siempre siguió el ejemplo de sus superiores de los cuales se siente orgullosa, porque gracias a ellos se formó adecuadamente.

Siempre ha estado entre los primeros puestos, sobresaliendo a nivel militar, deportivo y académico, ha sido Guardia de Honor, fue la primera mujer que perteneció a la comisión armerillo, hace parte de la Banda de Guerra gracias a su habilidad con las tamboras, posee el distintivo de los “Semilleros” por su aporte en trabajos de investigación, fue el primer puesto durante todo el 2021, otorgándole por ello la medalla “José Edmundo Sandoval”, pertenece al equipo de pentatlón, es integrante de los “Halcones Negros, un grupo élite de la EMAVI, del que solo forman parte los mejores cadetes, domina el idioma inglés y hará parte de una comisión en la Academia Interamericana de las Fuerzas Aéreas ( IAAFA).

Actualmente y por sus capacidades, distinciones, cualidades y méritos es la Brigadier Mayor del Grupo Cadetes, el mayor grado jerárquico en este grupo, un importante cargo que desarrolla con liderazgo, ejemplo, determinación y seguridad. Actualmente forma parte del   programa de Administración Aeronáutica y en diciembre espera obtener su grado de Subteniente para desempeñarse como Oficial en la especialidad de Inteligencia.

Es una joven que se esmera cada día por crear en sus cadetes ese sentimiento de convicción y sentido de pertenencia por la Fuerza Aérea Colombiana, que la disciplina y el cumplimiento a la norma sea parte del quehacer diario de cada uno, le gusta que su personal siempre esté bien presentado y porten su uniforme con el honor que representa ser parte de esta gloriosa Institución, actúa bajo la premisa del respeto y su comportamiento diario se forja en los principios y valores, adquiridos en la academia.

La Capitán Edna Peláez, comandante del Escuadrón Alfa considera a la Brigadier Mayor Gómez, una mujer con grandes capacidades y cualidades que la hacen digna representante de los Cadetes y Alféreces, su conducta impecable la han llevado a obtener grandes logros y resultados, no duda de su amor y agradecimiento por la Fuerza Aérea Colombiana, afirma que día a día trabaja por generar y mantener una cultura de disciplina, se preocupa por ser una excelente líder, compañera, hija, hermana y sobre todo no olvida la esencia de ser mujer.

La Brigadier Mayor Gómez, con su determinación y seguridad, reflejada en la manera que se expresa invita a todos los jóvenes a luchar por sus sueños, a confiar en sus capacidades, a no sentir miedo de enfrentar los retos que la vida trae consigo y hacer las cosas con pasión y actitud.