EMAVI: 92 años formando líderes del poder aeroespacial
En 92 años de historia, la Escuela Militar de Aviación Marco Fidel Suárez, EMAVI, ubicada en Santiago de Cali, se ha consolidado como una Institución de educación superior referente a nivel nacional e internacional. Su modelo de formación, que integra lo académico y lo militar, ha permitido preparar a generaciones de oficiales de la Fuerza Aeroespacial Colombiana, quienes se destacan por su liderazgo, disciplina y resiliencia.
A lo largo de estas más de nueve décadas, la EMAVI ha graduado a 160 cursos, integrados por subtenientes provenientes de todas las regiones del país, en programas acreditados en Alta Calidad por el Ministerio de Educación Nacional, Así mismo, profesionales de diversas disciplinas se integran cada año a través del Curso de Oficiales del Cuerpo Administrativo, fortaleciendo con su conocimiento especializado el cumplimiento de la misión constitucional.
Todo este proceso formativo se articula en la Estrategia Génesis, modelo integral que combina cinco dimensiones: militar, deportiva, aviador militar, profesional y de servicio. Bajo este esquema, el liderazgo se convierte en el eje central de la formación, proyectando oficiales íntegros, visionarios y comprometidos con la transformación social del país.
Hoy, cercana a su primer centenario, la EMAVI le apuesta al futuro con programas académicos fortalecidos y con un marcado enfoque aeroespacial. Su misión se extiende más allá de la aviación militar: contribuye al desarrollo de capacidades estratégicas nacionales, como el Centro de Operaciones Espaciales, encargado de operar el Satélite “Chiribiquete II”, que posiciona a Colombia en el dominio espacial.
En el último año, la proyección internacional ha sido un sello distintivo. Gracias a los programas de movilidad, más de 100 cadetes de la EMAVI participaron en intercambios y eventos académicos en Italia, Dinamarca, España, Corea, Panamá, Perú, Estados Unidos y otros países aliados, donde presentaron investigaciones que destacan la calidad de la formación que reciben.
A su vez, la EMAVI recibió a 16 cadetes internacionales. De ellos, tres se encuentran adelantando los cuatro años de formación militar y académica en el marco de los programas de internacionalización y alianzas académicas. Al obtener su ascenso como subtenientes, regresarán a Guatemala y República Dominicana, sus países de origen para servir con honor, valor y compromiso en sus respectivas naciones.
De igual manera, 13 cadetes de Brasil y Estados Unidos realizaron un periodo de seis meses de formación en esta Institución, con el propósito de afianzar sus conocimientos en cada área de estudio. Estas experiencias no solo fortalecen sus capacidades de liderazgo, sino que también consolidan a la EMAVI como un referente académico de alcance global.
El compromiso con la innovación también ha sido reconocido. En el VII Encuentro Internacional de Ciencia, Innovación y Tecnología, la EMAVI fue galardonada por sus proyectos de investigación, reflejo de la creatividad y el rigor científico de sus cadetes, quienes buscan aportar soluciones aplicadas a la seguridad y el desarrollo nacional.
La infraestructura es otro de los avances visibles. Nuevos alojamientos con espacios de descanso y coworking se complementan con el Centro de Recursos para el Aprendizaje y la Investigación (CRAI), un moderno escenario dotado con laboratorios de idiomas, salas de estudio, equipos tecnológicos y ambientes diseñados para la innovación educativa.
El alma mater de la Oficialidad, reafirma así su compromiso de seguir formando hombres y mujeres íntegros, guiados por valores y principios que inspiran confianza. Con firmeza, profesionalismo y vocación de servicio, los oficiales egresados de la EMAVI seguirán escribiendo la historia de la Fuerza Aeroespacial Colombiana y del país, proyectando a la Institución como un símbolo de excelencia y liderazgo en el escenario nacional e internacional.
¡Gracias, Cali! Por acoger a la Escuela Militar de Aviación durante todo este tiempo, por respaldar a la EMAVI en los momentos más difíciles y por ser parte de esta historia que aún continúa.