“Cuando era pequeño, me gustaba observar los aviones y helicópteros que llegaban y salían del Fuerte Militar de Tolemaida, el rugir de los motores de estas aeronaves sin duda aceleraba mi corazón, me daba emoción ver lo grandes que eran ante mis ojos y lo cerca que estaban de mi”: Subrigadier Andrés Felipe Sánchez Triana.